Bajo la consigna “Jujuy no se toca”, este miércoles 4 de marzo los jujeños protagonizarán una marcha en defensa de la provincia, seriamente amenazada por un proyecto impulsado por el kirchnerista Guillermo Snopek para intervenir el Poder Judicial, iniciativa de extremo peligro que puede abrir las puertas a una intervención mayor.
La movilización será desde todas las ciudades y comunidades y convergerá en la punta del parque San Martín de San Salvador de Jujuy. Desde allí, a horas 18, partirá con destino a la plaza Belgrano, donde el grito ciudadano será en defensa de la autonomía provincial y en contra de la impunidad.
La marcha de los jujeños es convocada por diversos sectores de la vida civil, tales como empresarios, productores, comerciantes, profesionales, docentes, trabajadores, organizaciones sociales y hasta particulares que participarán en familia, a los fines de preservar la paz social recuperada y consolidar la reconstrucción de un Jujuy en el que se puede vivir con respeto y en armonía, para lo cual levantarán sus voces en repudio al proyecto intervencionista del kirchnerismo voraz que viene por todos los jujeños.
No a la intervención ni a la libertad de Milagro Sala
Mario Fiad, Senador de la Nación por UCR - Jujuy, señaló que este miércoles 4 de marzo "vamos todos a defender a Jujuy. Vamos a mostrar que estamos convencidos que a los problemas de los jujeños los resolvemos los jujeños y que no estamos dispuestos a que se allane el camino para violentar a la justicia liberando a Milagros Sala".
"El pueblo jujeño tiene grandes cicatrices de su prepotencia y de su avasallamiento y también tenemos vívido en la memoria las escenas de violencia, de ataques a los edificios públicos y de la humillación a la que sometió", dijo.
Agregó que "las voces que pretenden la intervención del Poder Judicial en Jujuy, buscan desguazar a nuestra provincia para que terminemos siendo rehenes de intereses personales o sectarios. Los jujeños sabemos lo que pasa en Jujuy y también tenemos en nuestra Constitución Provincial los remedios necesarios para resolver nuestros problemas. Porque somos una provincia autónoma con sus instituciones funcionando, una provincia que quiere vivir en paz y que no admitirá abrir el camino para aplastar nuestra institucionalidad, y para que desde Buenos Aires se nos impongan funcionarios que nos digan cómo se tienen que hacer las cosas".
