En el fallo se dispuso que una vez firme la sentencia, Grandón sea puesto a disposición del Juzgado de Ejecución de Orán, y que por Secretaría se realice el cómputo de pena. El hecho ocurrió el 27 de junio de este año en San Ramón de la Nueva Orán, cuando Grandón se apoderó de una botella de whisky y al ser retenido por personal del local, los amenazó con un cuchillo.
En sus fundamentos para la condena, el juez expresó que quedó demostrado el hecho, atento a las pruebas incorporadas en el debate, porque Grandón amenazó con un cuchillo al personal de un supermercado cuando descubrieron que llevaba algo en el buzo.
El juez advirtió que el hecho se produjo mediando la exhibición de un elemento filo cortante, acompañado del forcejeo con los empleados del local. Tal circunstancia es un agravante ya que al haber sido descubierto podría haber cesado su accionar, más allá que no concretó su cometido.