POLÍTICA

Evo se considera presidente de Bolivia porque el Congreso no trató su dimisión

Evo se considera presidente de Bolivia porque el Congreso no trató su dimisión

Según Morales, las acciones del Gobierno de su país son nulas, incluyendo la orden de detención en su contra.

BUENOS AIRES.- El ex presidente de Bolivia, Evo Morales, depuesto el 10 de noviembre pasado por presión de las fuerzas armadas de ese país, dijo que aún continúa siendo el mandatario, porque la Asamblea Legislativa nunca trató la renuncia que lo forzaron a presentar. Respecto de la orden de aprehensión que el miércoles se libró en su contra, dijo que “todas las acciones del gobierno de facto de Bolivia son nulas”.

“Después de revisar legalmente la situación, debo decirles que Evo sigue siendo el presidente” dijo Morales, y recordó que aunque el 10 de noviembre presentó su renuncia “de acuerdo con el artículo 170 de nuestra constitución boliviana”, ésta no fue aceptada ni rechazada aún por la Asamblea Legislativa.

En un rueda de prensa convocada en el Centro Cultural de la Cooperación, en la Ciudad de Buenos Aires, para informar sobre la orden de aprensión dictada en su contra el día de ayer por la Fiscalía Especializada en Anticorrupción y Legitimación de Ganancias Ilícitas, en el marco de una causa por los delitos de “sedición, terrorismo y financiamiento al terrorismo”.

Su renuncia fue producto de un golpe de Estado, insistió. Señaló además que, “de acuerdo al artículo 161 numeral 3, la Asamblea tiene que admitir o negar la renuncia”.

La presidenta de facto, Jeanine Áñez, se reunió con su gente, sin convocatoria y sin quórum y se autoproclamó, dijo Morales. “Eso es totalmente inconstitucional. No cumple ni con las normas de la Asamblea ni con las de la Constitucional política del Estado”, afirmó.

Por lo tanto “todos los actos del gobierno de facto son nulos”, advirtió, incluida la orden de detención en su contra,

Juristas y constitucionalistas expertos interpretan que “entonces sigo siendo presidente”, concluyó el ex mandatario, ante los periodistas, rodeado de la bandera argentina a su derecha y la de Bolivia y la wiphala, a su izquierda.

Luego, en relación a la orden de detención en su contra, recordó -en línea con declaraciones de las últimas semanas- que no teme estar preso. “Estuve muchas veces preso, mi trayectoria política esta llena de arrestos, Sólo me faltaba el asilo y el refugio, pero ahora ya los tengo”, dijo entre sonrisas.

Explicó que armó un equipo para enfrentar la orden de arresto, un equipo a la cabeza del cual está el ex juez español Baltazar Garzón, integrado también por “muchos expertos que vienen de la lucha de los pueblos de Sudamérica, a los que se han plegado abogados bolivianos”. “Vamos a demostrar jurídicamente que esa orden de no es constitucional ni legal”.

La orden faculta al director departamental o “a cualquier funcionario público hábil o autoridad para que aprehenda y conduzca” a Morales ante las oficinas de la Fiscalía y en caso necesario podrá ser ejecutada con la “la ayuda de la fuerza pública”.

El expediente judicial está fundamentado sobre audios filtrados en los que -según la fiscalía -el ex mandatario coordinaba bloqueos desde México, el primer país al que viajó tras el golpe de Estado del 10 de noviembre.

Fuente de la Información: La Gaceta



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