Las escenas que se viralizaron y tuvieron repercusión nacional del hombre que abrió fuego en el interior de un bar en el Paseo Güemes, en la capital salteña, siguen dando qué hablar tras lo ocurrido. Matías Paz, el sujeto que disparó el domingo pasado y milagrosamente no mató a nadie, sigue prófugo de la Justicia, según informó El Tribuno.

El fiscal penal que intervino en el caso, Ramiro Ramos Ossorio, solicitó la captura del sujeto, al mismo tiempo que en una primera instancia también había pedido la aprehensión de la pareja del buscado, por el presunto delito de encubrimiento.

Sin embargo, fuentes vinculadas a lo ocurrido le confiaron a El Tribuno que la novia o exnovia de Matías Paz no solo no tiene nada que ver en el hecho que se investiga, sino que al parecer hace un tiempo habría denunciado por violencia de género a su pareja. Las fuentes señalaron que el hombre tendría una especie de obsesión con la joven.

Luego del violento y peligroso ataque efectuado por Paz el domingo en el interior de un bar del corredor gastronómico del Paseo Güemes, en la calle Belgrano al 200, los uniformados demoraron a la pareja o expareja del atacante. Mientras esto ocurría Paz aprovechaba para darse a la fuga. Al cabo de unas cinco horas la mujer fue liberada pero quedó vinculada a la causa. Sin embargo, en las últimas horas trascendió que no tuvo nada que ver con algún tipo de encubrimiento.

Otro de los detalles que surgieron es que el acusado de disparar a empleados de un comercio sería parte de una de las facciones de la barra brava del Club Juventud Antoniana, dato que es investigado por los sabuesos y tratan de certificar.

Lo cierto es que el sujeto seguía sin aparecer, motivo por el cual, entre otros, el fiscal de la causa dispuso la reserva de las actuaciones en pos de garantizar el cumplimiento de las medidas de investigación dispuestas hasta el momento. El secreto de sumario se extenderá hasta tanto el hombre sea detenido y puesto a disposición de la Justicia.

La Policía, por su parte, incrementó la seguridad en el Paseo Güemes, entre otras medidas, frente al recelo y temor que sienten las personas que viven y/o trabajan en la zona.

El hombre llegó hasta el lugar en estado de ebriedad y los empleados no quisieron atenderlo, por lo que discutió con ellos, se retiró y volvió minutos después, en un vehículo en el que circulaba en contramano.

Tras estacionar, ingresó al bar, extrajo un arma de fuego y efectuó al menos tres disparos en contra del personal, para luego huir. Afortunadamente ninguno de los trabajadores del lugar resultó lesionado, mientras que, al oír los disparos, los clientes salieron corriendo del bar y se dispersaron en la calle.

El hombre fue identificado y, a solicitud de Ramos Ossorio, el Juzgado de Garantías 3, de turno, ordenó su detención por el hecho, por lo que desde el lunes se trabajaba para ubicarlo y detenerlo.

Ramos Ossorio destacó que en el lugar del hecho se cumplieron todas las medidas de rigor en el marco de la investigación, y adelantó que continúan trabajando para el esclarecimiento.